Puntos a revisar

LUCES: iluminarán por igual y bien graduadas de altura. Las carcasas no deben estar rotas. La luz que ilumina la matrícula
y los intermitentes deben funcionar correctamente.


NEUMÁTICOS: el dibujo debe tener una profundidad mínima de 1,6 mm. Las paredes laterales no pueden llevar grietas
ni cortes. Deberán estar bien hinchados y no está permitida la combinación de neumáticos radiales delanteros si los traseros
son cruzados.


SUSPENSIÓN: los muelles de la suspensión no deben estar gastados ni oxidados. Una prueba casera consiste en hacer
botar la carrocería varias veces y soltarla de golpe, ésta deberá volver a su posición normal tras dos rebotes, si continúa
botando el amortiguador estará en mal estado y no pasará la ITV.


FRENOS: el de mano deberá bloquear el coche en una pendiente fuerte. El freno de pie debe detener el coche sin
desviarlo hacia los lados y sin vibrar.


DIRECCIÓN: no deben notarse ruidos ni dureza. Ojo si se han golpeado las ruedas violentamente contra bordillos o si
se ha forzado el volante al máximo sin producirse desplazamiento, los mecanismos de la dirección podrían verse alterados.


SALPICADERO: no deberá estar encendida ninguna luz de alarma o avería.


OTRAS COMPROBACIONES IMPORTANTES: tubo de escape debe ser silencioso, sin grietas y bien sujeto al
chasis; cinturones de seguridad bien sujetos y con el material no desgastado; claxon con sonido alto y claro; limpiaparabrisas
no desgastados y con agua; chasis, puertas y aletas no oxidados.